Sensibilidad dental

¿Qué es la sensibilidad dental?

Es la reacción dolorosa de los dientes frente a diferentes estímulos. Se calcula que es un problema muy común entre el 9 y el 30 % de la población adulta. Se produce por un desgaste o erosión en la dentadura que deja expuesta la parte interna del mismo. Los desencadenantes del dolor pueden ser líquidos calientes o fríos, helado, alimentos muy dulces, aire frío, cepillo de dientes con cerdas duras o al masticar.

¿Cuáles son sus causas?

Las causas pueden relacionarse con un cepillado incorrecto o agresivo que desgaste el diente, la aparición temprana de caries, la retracción de encías, el bruxismo y el esmalte dental debilitado. Además, los hábitos de alimentación también pueden llevar a una erosión de los dientes, principalmente los alimentos y bebidas ácidas como las gaseosas.

¿Cómo puedo hacer para prevenirla o evitar que aumente?

Para evitar la sensibilidad o que algún diente se vuelva sensible en el futuro es importante tener en cuenta estos consejos:

Cepillar correctamente los dientes con un cepillo de cerdas suaves.

Mantener una buena salud bucal.

Mantener hábitos de alimentación saludable, ingiriendo menos alimentos o bebidas ácidas o muy dulces.

Utilizar un dentífrico especialmente formulado para reducir la sensibilidad.

Consultar con un/a profesional para que realice la evaluación de la salud bucal y las causas de la sensibilidad, de esa manera podrá recomendar tratamientos efectivos.